Un homicidio a plena luz del día y frente a una escuela conmovió a Cinco Saltos. Francisco Castillo fue imputado por asesinar de ocho disparos a Diego Fasce el martes pasado, en un hecho que la Fiscalía calificó como homicidio agravado por alevosía, figura que prevé prisión perpetua como única pena posible. El acusado permanecerá detenido por seis meses, según resolvió la jueza Rita Lucía en la audiencia de este viernes.
El episodio ocurrió frente a una escuela primaria de la localidad, donde Castillo atacó a Fasce a balazos mientras éste se alejaba del lugar. Según la acusación, “le disparó por la espalda, sin posibilidad de defensa”, y luego continuó el ataque incluso cuando la víctima ya estaba en el suelo.
Ocho disparos y un contexto alarmante
Cinco de los disparos impactaron en el cuerpo de Fasce, tres de ellos cuando ya estaba caído, detalló el fiscal jefe Gustavo Herrera durante la formulación de cargos. En la audiencia también se presentó el testimonio clave de la pareja del fallecido, quien explicó que el conflicto tenía origen en una relación anterior con la sobrina del imputado.
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El Ministerio Público Fiscal remarcó la violencia del hecho, su contexto público y el uso de un arma de fuego como agravantes. Por eso, solicitó un año de prisión preventiva, a pesar de que la investigación tendrá un plazo inicial de cuatro meses.
La defensa habla de violencia de género
Desde la defensa, el abogado Michel Rischmann planteó un contexto de violencia de género como antecedente del hecho, y aseguró que Castillo actuó movido por la amenaza constante que sufría su sobrina, ex pareja de Fasce.
Según los registros judiciales, Fasce había sido denunciado por violencia familiar y tenía seis causas abiertas en su contra por desobedecer restricciones judiciales. El abogado defensor citó incluso un informe del equipo interdisciplinario del Juzgado de Familia, que días antes del crimen advirtió sobre el riesgo psico-físico que corrían las partes y sobre la presencia de armas de fuego como factor de peligro concreto.