Un importante operativo policial derivó en el secuestro de más de 40 truchas pescadas de manera ilegal en la zona cordillerana. El procedimiento fue llevado a cabo en un control vehicular sobre la Ruta Nacional 40, donde personal de la fuerza detuvo un automóvil que circulaba desde la provincia de Neuquén con destino aún no confirmado.
El conductor del Renault Clío inspeccionado admitió sin rodeos que regresaba de una jornada de pesca en la zona de Alicurá, uno de los puntos más vigilados por autoridades ambientales debido a su biodiversidad y la presión constante de pescadores furtivos. Durante la requisa, los uniformados hallaron un total de 43 truchas en el interior del vehículo, así como elementos de pesca artesanal y carnadas utilizadas en la actividad.
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Según informaron fuentes oficiales, la pesca había sido realizada sin autorización y en condiciones que violan la normativa vigente, como el uso de métodos no habilitados y la superación del cupo permitido por persona. La infracción representa una falta grave en el marco de las leyes que regulan la conservación de especies ictícolas en la región.
Ante la evidente violación del reglamento, los efectivos procedieron al secuestro inmediato de los ejemplares y de todos los elementos utilizados en la pesca ilegal. Además, se labró el acta correspondiente al conductor, quien podría enfrentar sanciones económicas significativas, conforme lo establece la legislación provincial en materia de pesca deportiva y conservación ambiental.