La confirmación de la visita de Scott Bessent, secretario del Tesoro de Estados Unidos, a Argentina marca un nuevo capítulo en la relación bilateral con Estados Unidos y descuida la relación por el swap con China. En ese sentido, este medio se contactó con el periodista de Editorial Perfil, Ariel Maciel.
“Gracias al audaz liderazgo del presidente Milei, las relaciones entre Estados Unidos y Argentina son más sólidas que nunca”, leyó Ariel Maciel del comunicado emitido por la embajada estadounidense, destacando la relevancia del contexto en que se produce la visita, que es un día antes del anuncio del acuerdo con el FMI.
“El vínculo con Estados Unidos se vuelve clave en medio de una etapa económica delicada y una guerra comercial global donde se define quiénes están del lado estadounidense y quiénes del lado chino”, sostuvo. Y agregó: “La administración de Milei ha sido una de las primeras en alinearse abiertamente con Washington”.
En qué contexto se da la llegada de Scott Bessent a Argentina
La visita de Scott Bessent coincide también con el paro general de la CGT, el tercero durante la gestión de Javier Milei. “Es una jornada cargada de simbolismo: por un lado, señales de apoyo externo; por el otro, crecientes tensiones internas”, explicó Maciel.
Luego, manifestó que la estrategia oficial apunta a posicionar a Argentina como “el faro estadounidense en el sur de América Latina”. Para eso, se barajan acuerdos bilaterales que esquiven las restricciones del Mercosur. “El Gobierno planteó incluso la posibilidad de un tratado de libre comercio directo con Estados Unidos”, comentó.
Argentina y la imposibilidad de desligarse de las relaciones internacionales con China
Sin embargo, el giro geopolítico enfrenta desafíos. “Argentina no puede resignar el swap con China simplemente por alinearse políticamente. Hoy no puede elegir. Las reservas dependen de ese vínculo”, advirtió el periodista. Y añadió que el canciller Werthein “ni siquiera viajó a China desde que asumió, lo que debilita el frente diplomático con el gigante asiático”.
En paralelo, se espera que el nuevo acuerdo con el FMI defina un cambio en la política cambiaria. “El crawling peg está en sus últimas horas”, afirmó. También anticipó el fin del “dólar blend”, mecanismo que “generó pérdidas por USD 23.000 millones al Banco Central”.
Panorama incierto para la unificación cambiaria
Sobre la salida del cepo, el entrevistado detalló: “Se está negociando cómo liberar dividendos para empresas extranjeras sin provocar una estampida. Algunos proponen liberar los flujos nuevos, otros hablan de un esquema gradual que evite una puerta 12 financiera”.
A su vez, remarcó que el Gobierno apuesta a que la estabilidad fiscal sirva como escudo frente a la inestabilidad internacional. Pero el escenario interno no ayuda. “La CGT empieza a tender puentes entre sectores del peronismo que hoy están enfrentados. Si la oposición se une, el mercado lo ve como una amenaza al programa económico”, sostuvo.